Tardes de junio
Tardes de junio de color de melocotón, aromas a azahares tardíos y playas, aún, gratamente solitarias. Transición entre el recio frío y el calor sofocante, donde la prisa se detiene y prepara el ánimo para esa época venidera del solaz de los minutos lentos en que ni reloj hace falta, tal vez sólo el de arena en que la lenta caída de sus granos sirve de distracción para la vista. Luces que se alargan en el cielo, ahuyentando la noche hasta madrugadas imposibles. Trastoque de armario, acopio de libros. Y cuando los primeros lametones veraniegos entreveran sus caricias alrededor de mi cuerpo, yo, desnuda en esta tarde, mientras sueño, me dejo mecer, sin prisas, en los brazos amorosos de la siesta.
3 comentarios
belita -
Felicidades
prometeo -
un fuerte abarzo.
Pequeña Langosta -